Ascensor mal montado.

Las consecuencias del mal montaje de un ascensor. ¡Créanlo!. Tarde o temprano aparecen problemas.

Cuando una compañía aprueba el diseño de un ascensor y decide iniciar su fabricación en serie, previamente, ha realizado multitud de pruebas y ensayos. Primero la proyección de la idea, el diseño, una infinidad de cálculos, los primeros prototipos y las pruebas en cada una de sus partes. Estos son conocimientos que verdaderamente se me escapan, pero imagino que no ando muy equivocado, puesto que similares procedimientos, es sabido por todos, se llevan acabo en cualquier marca conocida de automóviles, autobuses, camiones y en general cualquier medio de transporte en los que la seguridad de las personas sea el objetivo primordial a conseguir.

Es por esto que les digo que a la hora de montar un ascensor los fabricantes detallan un procedimiento y un orden en el montaje que vienen avalados por todas estas pruebas y ensayos que certifican unos resultados de seguridad, eficiencia, confort y en general de buen funcionamiento. Entonces, ¿quienes somos nosotros para cuestionar e incluso tomar decisiones unilaterales de no montar o modificar la ubicación y forma de algunas piezas? A veces los montadores de ascensores nos creemos más inteligentes que los ingenieros.

En fin, en las próxima fotos voy ha explicar las consecuencias de haber montado mal los amarres del contrapeso de un ascensor. Se trata de un contrapeso de un Shindler Smart. Este contrapeso trae en su parte superior unos agujeros para introducir ahí los amarres. Trae más de los necesarios, pero los sobrantes son porque según si el ascensor es de mano izquierda o derecha, o dependiendo de las medidas de la cabina del ascensor y por tanto del contrapeso, se usaran unos u otros según "plano de montaje". El chasis de este contrapeso es un estandar para diferentes usos.

Vamos a ir viendo fotos de lo que les cuento y se entenderá mucho mejor:

En esta foto  podemos observar la correcta disposición de los amarres que, según plano de montaje, debemos usar para mantener el perfecto equilibrado del contrapeso. En general todos los Smart de 450 kg traen esta disposición. El truco es observar siempre dos agujeros libres en el extremo.

Este es un contrapeso de mano contraria pero podemos observar que en el extremo solo hay un agujero. La disposición es incorrecta. Debemos trasladar todos los amarres un agujero a la derecha.

Visto desde encima del techo (los de detrás son los del contrapeso) se observa el verdadero problema que causa todo esto. La caída de cables de contrapeso no es totalmente vertical. Cuando el contrapeso esta arriba, la entrada de los cables de tracción en las gargantas de la polea es con inclinación. Esto a lo largo de los años, según la actividad del ascensor, va causando el desgaste lateral de las gargantas de la polea.

Este polvo rojo que se observa en encima del alineador de cables son las partículas de hierro procedentes del desgaste de las gargantas de la polea de tracción y también de los cables.

Hemos desmontado el alineador y ¡sorpresa! Es el resultado del giro constante de los cables de tracción al aproximarse a la polea, ya que en ese punto (contrapeso arriba del todo) es donde el ángulo de entrada es mayor.

Fíjense que llega incluso a cortar la pieza por el brutal desgaste. Si el alineador se cae de su ubicación podrían incluso salirse las cables de tracción de la polea motriz.

  

Esta polea no pertenece a este ascensor pero evidencia lo que ocurre en el caso que nos ocupa. La garganta trasera ha sufrido mayor desgaste y el cable de tracción este más hundido. Esto hará que este cable tenga diferente fricción que los demás. Un caso como este provocaba unas vibraciones  a la cabina del ascensor que se traducían en ruidos excepcionales durante el viaje.

Aquí tenemos ya el contrapeso con sus amarres trasladados y tras una serie de pruebas hemos podido comprobar en viaje que ha sido ¡mano de santo! Se han quitado los ruidos, hemos evitado el progresivo desgaste de la polea y de los cables del ascensor, que aun van ha durar unas años más. También se ha limpiado el contrapeso y el techo de la cabina que estaban llenos de polvo rojo (limadura de hierro oxidada) como ya mencionamos anteriormente y en definitiva hemos dado un buen servicio a nuestro cliente. Que para eso paga, para tener seguridad, fiabilidad y confort.

Ya que mencionamos el buen servicio quiero agradecer anónimamente a la empresa en la que trabajo la determinación que tienen de dar un buen servicio a sus clientes y que me permitan y animen a realizar trabajos de calidad. ¡Gracias!

Bien amigos, esto es todo. Espero que les halla gustado este post, que hayan aprendido y que al igual que yo hallan disfrutado. Recuerden que pueden seguirme en Twitter ,  Facebook y en Google +. Un cordial saludo.